1. Contacto con la naturaleza

Esta tendencia reivindica nuestra relación con el medio ambiente y los materiales naturales. Los materiales orgánicos se convierten en piezas especiales cuando se mezclan técnicas milenarias con los nuevos avances tecnológicos, consiguiendo proyectos que consiguen un equilibrio entre naturaleza e innovación.  

También es una tendencia relacionada la biofilia, que hace referencia a los diseños y proyectos que buscan reconectar a las personas con su entorno, permitiendo disponer de aire fresco, luz natural y agua dentro de las construcciones. Se trata de crear conexiones visuales y físicas, usando materiales naturales que complementan el lugar que habitan.






2. Diseño de Autor

Crear espacios y decorarlo con piezas que cumplen con dos requisitos: alta producción y series limitadas. De esta manera, se crea una propia visión e interpretación de los espacios  mediante la manifestación de su estilo e inspiración artistica muy concreta y especial. Esta es también una buena estrategia para comunicar la identidad de la marca o de las personas que han creado el proyecto.




3. Caracter Industrial

Esta tendencia se basa en espacios abiertos, monocromatismo en colores fríos, el uso de pocos elementos decorativos y la utilización de materiales rudos como el metal, el aluminio, el cemento y el vidrio.



A nivel de las estructuras, para lograr ese aire industrial contamos con varias opciones, como dejar a la vista los cableados o los conductos de las instalaciones y cambiar las puertas de madera por puertas metálicas o vidrio de estilo industrial. En cuanto a los objetos decorativos, nos limitaremos al uso de grandes focos o lámparas metálicas, muebles en colores oscuros y materiales con signos de desgaste propios del uso.